Después de irse con él, el lunes después de la escuela, era bastante obvio que ella se había quedado en su casa. Honestamente, me enfermaba, pero hice mi mayor esfuerzo para no dejar que me afectara, bueno, para intentar no mostrar que me afectaba es algo más cercano a la verdad.
Los rumores comenzaron inmediatamente. Las charlas de la nueva pareja caliente de profesores se extendieron alrededor de toda la escuela en cuestión de minutos. Cada vez que alguien lo mencionaba, mi estómago empezaba a dolerme, pero me esforcé en no mostrarlo. En vez de eso, flirteé con Olly y fingí que estaba ansiosa por verlo el sábado.
Toda la semana estuve realmente ocupada después de la escuela, así que eso me ayudó a que mi mente no estuviera en mi profesor de matemáticas. El miércoles y el jueves fui a casa con Nico, y estudiamos. Sin embargo, para ser honesta, esta semana no necesité que me ayudara demasiado, las notas de Pedro y la ayuda que me dio el lunes me dejaron las cosas bastante claras. También ayudó que a Patricia le gustara matemáticas, por lo que ella estaba llevando el proyecto durante las horas de clase. Así que después que Nico y yo estudiáramos por poco rato, miramos una pelicula antes de comer.
Era divertido estar cerca de Nico. Él estaba evitando hablar de su madre a toda costa, ambos lo hacíamos. El aniversario de su muerte era el Domingo, por lo que íbamos a ir allí a la mañana temprano para que él pudiera presentar sus respetos, y luego teníamos planeado salir para que pudiera alegrarlo y distraerlo un poco.
El viernes por la noche fui a cenar con Jaxon. Estuvo bien; como de costumbre, Jaxon no falló en hacerme reír con sus historias de citas desastrosas y sus mejores éxitos de todos los tiempos. Me sugirió salir el sábado de la semana siguiente en lugar del viernes. Uno de sus amigos, a quien ya había conocido mediante pedro, iba a tener una fiesta, y Jaxon quería que fuera con él. Dijo que Amy podía ir también, y me imaginé que le encantaría hacerlo. Así que después que le hice prometerme 5 veces que pedro no estaría ahí, finalmente acepté ir. Me pareció algo divertido, por lo que la fiesta sería probablemente buena.
***
Hoy era sábado y estaba sentada viendo cómo las manecillas del reloj se movían demasiado rápido. Por centésima vez miré mi celular, ansiosa por que sonara y que fuera Olly, para cancelar la cita o algo. Un asqueroso caso de indigestión me caería muy bien en éste momento. Quizás podría llamarlo y decirle que tengo indigestión... Cuando oí que un auto estacionó afuera, dejé salir un gemido de frustración. Llegó justo a tiempo. Siete en punto en la puerta, tenía que darle puntos al chico por ser puntual. Realmente iba a tratar en esta cita. Olly era un chico agradable, y era atractivo también, iba a dar mi mayor esfuerzo para seguir adelante.
Me dirigí al piso de abajo con lentitud, dejando que mi papá abriera la puerta. ¡Tal vez él asuste a Olly por mí y así ni siquiera tendré la necesidad de ir! Me detuve detrás de mi papá, que estaba parado ahí, mirando. Su postura no era muy cordial mientras bloqueaba la entrada, dejando que Olly se quedara afuera.
"Estoy hablando en serio, conozco a tu padre y si llego a escuchar una sola cosa acerca de ella siendo maltratada esta noche, voy a hablarle antes de venir a buscarte." Papá lo amenazó.
Wow, pobre Olly, ni siquiera cruzó la puerta y ya se lo estaba diciendo. Sonreí como disculpándome mientras tocaba el brazo de mi papá, dejándole saber que estaba allí. Se giró ligeramente para mirarme, todavía con el ceño fruncido. Siempre había sido protector conmigo; era hija única por lo que exageraba completamente. Era casi divertido en una manera malditamente embarazosa.
"Lo entiendo, y ni siquiera soñaría con maltratarla, lo prometo." Olly le dio su palabra, luciendo como si quisiera huir gritando. Corre, por favor, corre. Sin embargo no lo hizo. Mi corazón se hundió al ver que mi papá le hacía señas para que entrara a la casa.
"Hey, Olly." Me obligué a sonreír y me giré hacia mi papá. "Tenemos que irnos papá. No volveré tarde," le prometí al tiempo que agarraba mi chaqueta del perchero y me dirigía rápidamente hacia la puerta antes de que él pudiera seguir fastidiando a Olly.
"Está bien, hija, diviértete." Papá me sonrió antes de voltearse y darle una última mirada amenazante.
Agarré el brazo de Olly y casi lo empujé por la puerta, cerrándola detrás de mí. Dejó salir un largo suspiro antes de mirarme con los ojos como platos.
"Maldición, Paula, ¡tu papá si que asusta!" masculló, sacudiendo la cabeza.
Me reí y rodé mis ojos. "Es inofensivo, a menos que me lastimes, en ese caso te perseguirá." Bromeé, y le sonreí.
Se rió silenciosamente, y frotó su nuca tímidamente. "Por cierto, te ves genial." Me halagó, repasando lentamente mi cuerpo con la vista.
Me sentí cohibida a pesar de que no estaba usando nada revelador, sólo un pantalón negro y una remera verde; nada especial porque no quería darle una impresión equivocada. Aunque puede que flirtear con él durante toda la semana ya le habría dado una impresión equivocada. Pero juré que en serio iba a intentarlo esta noche. Tal vez hasta llegue a gustarme y no le habré dado una falsa impresión después de todo. Supongo que veremos cómo va a medida que transcurra la noche.
"Gracias, tú también." Y era cierto, su cabello estaba bien peinado, estaba usando unos jeans y una agradable camisa abotonada azul.
Esa camisa le quedaría diez veces mejor a pedro. Oh por el amor de Dios, ¡tengo que dejar de pensar en mi estúpido profesor!
"¿Estás lista?" me preguntó, mientras dirigía la mirada hacia su auto. Asentí y lo seguí hasta él, me subí y odié lo mal que se sentía todo. Hasta su lindo auto limpio parecía estar mal de alguna manera. "Entonces, ¿estuve pensando que podíamos ir a Zac's? " sugirió, haciendo que sonara como una pregunta.
"Claro, me encanta Zac's."
Estaba bien, porque el lugar no era demasiado romántico tampoco, sólo un lindo lugar que tenía hamburguesas geniales. Olly sonrió, arrancó el auto y lo sacó de mi entrada. Anduvimos en un silencio incómodo por la mayor parte del trayecto, haciendo algunas pocas conversaciones sobre la escuela y la película que íbamos a ver. En realidad, suspiré de alivio cuando paró el auto en el estacionamiento del restaurante porque por lo menos ahora tendríamos algo para distraernos de la incomodidad.
Me sentí incómoda y extraña durante el tiempo que estuvimos en el restaurante. Sinceramente intentaba con todas mis fuerzas que me gustara. Él era dulce y verdaderamente divertido de un modo nervioso, pero no teníamos nada en común por lo que pasamos gran parte del tiempo pensando en algo de qué hablar mientras comíamos.
En el fondo yo sabía que a pesar de que estaba tratando de darle una oportunidad, mi corazón se negaba incluso a pensar en él de esa manera. A lo largo de la cita seguía comparando las citas que había tenido con pedro, en las que reíamos con facilidad y siempre teníamos algo de qué hablar. Tal vez era porque Pedro era mayor o algo, más experimentado, así que sabía cómo hacer que una chica se sintiera cómoda. Yo realmente no podía decir que era exactamente, lo único que sabía era que no había chispa entre Olly y yo.
Después de terminar de comer, decidimos dirigirnos al cine donde nos reuniríamos con el resto de mis amigos. En silencio tuve la esperanza de que una vez que estuviéramos con otras personas ambos pudiéramos relajarnos, y tal vez seríamos capaces de salvar el resto de la noche.
Olly se negó a dejarme pagar la comida. Mientras caminábamos hacia el coche, sentí su mano rozarse contra la mía. Instintivamente me aparté y fingí buscar mi celular en mi cartera, por si acaso estaba tratando de tomar mi mano o algo así. Secretamente deseaba que él no hubiera sugerido este pequeño restaurante en primer lugar. La única razón por la que estaba haciendo esto era para tratar de darle celos a Pedro y conseguir algo de venganza, pero incluso eso no estaba funcionando como había planeado.
Hablamos de música durante el camino, por suerte, en el momento en que nos detuvimos en el estacionamiento, sólo quedaban unos cuantos minutos hasta que nos pudiéramos reunir con los demás. Sentí que me relajaba porque solo con saber que la parte de la cita había terminado, bueno, hasta que me llevara a casa de todos modos.
Amy me sonrió en cuanto entramos por la puerta. Yo resistí el impulso de poner los ojos en blanco frente a su obviedad. Sabía que ella inmediatamente me arrastraría al baño para sacarme el chisme de la cena. No estaba equivocada. Tan pronto como llegamos a donde ella, Nico, y cinco de nuestros otros amigos estaban, ella agarró mi mano y asintió con la cabeza hacia los baños.
‘‘Vamos a orinar antes de la película, Paula’’ — gorgojeo alegremente. Suspiré abatida, sabiendo que era inútil discutir, y le permití llevarme hacia los baños de damas. Tan pronto como la puerta se cerró se volvió hacia mí, mirándome expectante.
"¿Y?"
Suspiré y me encogí de hombros.
"No sé, es un buen chico es solo que... " —Me interrumpí, sin saber qué más que decir.
"Es sólo que todavía estás colgada del imbécil ese. " —concluyó ella, poniéndose la mano en la cadera con evidente desaprobación.
"Amy, estoy tratando, de verdad, pero es sólo que sigo pensando en pedro todo el tiempo. Es demasiado pronto para empezar a tener citas con alguien más. Olly es dulce, gracioso, y caliente, pero yo no pude dejar de pensar en Pedro toda la noche."–hice una mueca y me senté en la encimera al lado del lavabo, esperando a que me regañara otra vez para poder seguir adelante.
No lo hizo, en lugar de eso se sentó junto a mí y me paso el brazo alrededor de mi hombro.
"Sé lo que es tener sentimientos por alguien y no ser capaz de hacer nada al respecto. Basta con vernos a mí y Ryan, he estado loca por él desde siempre, y apenas si he hablado con él. Podría ser peor, podrías haber tenido a pedro frente a tu cara todos los días, porque créeme, es duro!’’— me miro sabiamente.
Asentí y no le dije que yo tenía a Pedro frente a mí todo el tiempo, me hubiera gustado poder decírselo y entonces ella entendería mejor porque estaba molesta y luchando por seguir adelante.
"Dale una oportunidad a Olly"— imploró. "Toma su mano, bésalo, ve si algo puede crecer a partir de ahí. Todo lo que tienes que hacer es encontrarlo atractivo. Lo otro podría venir después. Él es un buen chico. Apuesto a que será un gran novio. "
Ella me miró suplicante mientras apretaba mi hombro. "Si le das una oportunidad y no funciona, me comprometo a comer helado contigo hasta que nos salga por las orejas. " – se hizo una cruz sobre el corazón y asintió.
Me reí ante su solemne voto y asentí en aceptación. "Está bien, tienes razón. Vamos a ver la película. " — Puse una sonrisa falsa en mi boca y me levante.
Sólo necesitaba esforzarme más, eso es todo. Ella sonrió, y salimos del baño, en dirección a donde se encontraban los demás charlando en el vestíbulo.
Olly me sonrió mientras subíamos así que le devolví la sonrisa y fui a pararme a su lado. Tragué saliva y deje que mi mano rozara la suya a propósito. El dio una mirada rápida, con una sonrisa tirando de las comisuras de su boca mientras acariciaba con un dedo el dorso de mi mano. Contuve la respiración y lo mire, sus ojos brillaban de esperanza, como si estuviera esperando mi permiso o algo así. Sonreí y le di la vuelta a mi mano para que nuestras palmas quedaran frente a frente, silenciosamente le di el visto bueno, él sonrió y tomó mi mano firmemente.
Mal. Se sentía mal. ¡No debería estar sosteniendo su mano! Pero dejé que pasara de todos modos.
"¿Quieres palomitas o algo?’’ —me preguntó, sonriendo.
Me encogí de hombros. "Claro, si quieres. Yo las compro porque ya tu pagaste la cena.’’— Rodó los ojos y me jaló hacia los puestos, sacando su cartera para pagar a pesar de que le acababa de decir que yo lo haría.
El resto de la noche fue mejor que el inicio. Olly pasó el brazo sobre el respaldo de mi asiento, pero no hizo ningún otro movimiento para tocarme, lo cual agradecí. Siguió lanzándome miraditas a lo largo de la película, lo vi un par de veces por el rabillo del ojo.
Cuando la película terminó me sentí enferma. Un viaje en auto con él significaba aquí a besarme; desde fuera la cita probablemente parecía que iba bien. Probablemente él esperaba besarme en la puerta como mínimo. Amy asintió para darle valor mientras nos despedíamos en el estacionamiento.
Me mordía las uñas mientras caminábamos hacia su auto. El aún sostenía mi otra mano; su pulgar dibujaba pequeños patrones contra mi palma mientras el silencio parecía sobrepasarnos a los dos. Sonríe agradecida cuando abrió la puerta para mí. Y él es un caballero además de ser un dulce.
Hablamos sobre la película en el camino a casa, diciendo nuestras partes favoritas. Eso parecía llenar el incómodo silencio que se mantenía en el aire. Cuando nos detuvimos frente a mi casa miré hacia él nerviosamente, sólo para ver que él ya se había bajado del auto. El llegó a mi lado y abrió la puerta para mí, mientras yo sólo me sentaba ahí pensando qué diablos debía decir.
¿Pensará él que lo voy a invitar adentro o algo? ¿Será por eso que se bajó del auto? O!, Es que no tuvo suficiente de mi papá antes ¿qué quiere entrar y verlo de nuevo?.
"Olly, no puedo invitarte dentro" murmuré, mirando entre él y la puerta nerviosa.
El rió y sacudió su cabeza. "Sólo iba a dejarte hasta la puerta." Tomó mi mano y prácticamente me arrastró por el camino hasta la puerta.
Me sentí enferma. Mi corazón golpeaba tan rápido en mi pecho, a esta velocidad probablemente tendría un ataque cardíaco antes que me besara.
"Lo pasé bien, gracias" murmuré, aún un poco escasa de palabras.
El sonrió y asintió. "¿Piensas que podríamos salir a pasear mañana?" Preguntó, mirándome esperanzado.
Por una vez estaba agradecida que tenía una excusa y no tenía que pensar en una.
"No puedo mañana, tengo planes todo el día, lo siento."
El pareció un poco desilusionado y yo instantáneamente me sentí culpable. Odiaba hacer sentir mal a la gente, que era usualmente por lo cual terminaba haciendo cosas que no quería hacer todo el tiempo, porque tenía problemas para decir no.
"O, está bien… supongo, y el lunes en la escuela. ¿Podemos almorzar juntos o algo?" Ofreció nervioso.
O demonios, otra cita. Bueno, más o menos otra cita. Yo quise decir no, quería empujarlo hacia su auto y decirle que estaba totalmente loca por el profesor. Pero todo lo que pude ver fue la cara de Amy siendo me que necesitaba seguir adelante, y la cara de Miss Teller mientras flirteaba con Ppedro y sus pequeños viajes de casa a la escuela juntos cada día esta semana.
Hice un gran suspiro y me tragué la inmensa duda que tenía sobre si estaba lista para esto o no. “Claro, almuerzo suena bien” acepté, tratando de sonar más confiada de lo que sentía dentro.
El sonrió ampliamente. “¡Genial!” dijo animado. “Bueno, buenas noches entonces y gracias por una gran noche.” Se paró un poco más cerca de mí. Resistí el instinto de abofetearlo mientras él comenzaba a inclinarse hacia mí.
O diablos! solo hazlo, Paula, sigue adelante y deja de compararlo con pedro. Pedro siguió adelante, entonces tú también deberías!.
Los labios de Olly presionaron los míos sólo por uno segundos y en ese momento no sentí nada. Nada de calor, nada de chispas, sin pasión que corriera por cada una de mis venas. Nada. Fue un buen beso, suave y dulce, pero sólo no me hizo sentir nada. Obviamente sí hizo sentir algo a él porque se retiró y sonrió ampliamente como si hubiese ganado la lotería o algo. Forcé una sonrisa en respuesta.
Él asintió hacia su auto “debería irme entonces.”
Yo sonreí y luego comencé a reír. “si mi papá probablemente está mirando por la ventana, por lo que estará aquí en un minuto o dos,” bromeé, mientras él dirigía sus ojos hacia la ventana y los achicaba nerviosamente. “Estoy bromeando, te veo el lunes.”
Él se rió como cordero y sacudió su cabeza. “Nos vemos.” Se volvió y caminó hacia su auto mientras yo entraba.
Cuando estuve dentro me recliné contra la puerta y me negué a llorar. Realmente me sentía como si hubiese engañado a pedro, pero eso era estúpido porque él no me quería. Suspiré y me empujé desde la puerta hacia el dormitorio.
A la mañana siguiente rodé y mi mano golpeó algo duro. La cosa dura gruñó, así es que ví y salté , un grito estaba a punto de romper por mi garganta, hasta que vi allí a Nico, sonaba dormido. ¿Qué demonios está haciendo él en mi cama? Sacudí su hombro bruscamente.
“¿Nico qué estás haciendo aquí?” grazné. Me recosté nuevamente cerca de él, acurrucándome cerca en su lado y apoyando la cabeza en su pecho.
Bostezó ruidosamente. “Vine a buscarte” murmuró.
Junté mis cejas y volteé mi cabeza para poder ver el despertador. Aún no eran ni las ocho de la mañana. No se suponía que estuviera aquí hasta las nueve.
“¿Viniste a buscarme una hora antes y luego sólo decidiste tomar una siesta en mi cama?” me burlé, sonriendo.
Él sonrió tristemente. “No podía dormir así es que pensé en venir a verte temprano. Tu mamá me dejó subir. Aún estabas dormida y decidí dejarte dormir en vez de despertarte. Debo haberme quedado dormido también” articuló, frotándose los ojos bruscamente.
Gemí. ¿No podía dormir? Apuesto que eso es el código para ‘estaba alterado por mi mamá y estuve recostado, despierto y alterado toda la noche’. Lo abracé fuerte y tiré las sábanas hacia arriba envolviéndonos.
“Vuelve a dormir, no necesitamos ir todavía” susurré, recosté mi cabeza en su pecho nuevamente escuchando el latir perezoso de su corazón.
Él suspiró, pareció relajarse de nuevo mientras envolvía sus brazos alrededor mío, apretando la parte de atrás de mi cabeza. Él estaba respirando profundo en minutos mientras yo sólo me quedé tendida ahí, despierta, tratando de no llorar porque él estaba tan triste. Hoy era el día que yo tenía que ser fuerte. Hoy era el día que necesitaba cuidar de él y asegurarme que estuviera bien, a diferencia de lo usual. Cerré mis ojos y finalmente me deslicé en el sueño también.
Dos horas después estábamos en el estacionamiento del cementerio. Tragué el nudo que se había formado en la garganta durante el viaje. Odiaba estar aquí tanto como él, pero no podía dejar que lo hiciera sólo. Sostuve su mano firmemente mientras comenzábamos el camino hacia donde estaba enterrada. Cuando llegamos me detuve unos pasos más lejos y lo dejé poner las flores en su tumba. Lirios blancos, sus favoritos.
Me mantuve ahí quieta, esperando a ver qué quería hacer él. Algunas veces él se quería mantener por un rato ahí, pero la última vez que vinimos, para su cumpleaños, él no pudo estar más de un minuto o algo así. Le había llevado flores y no nos pudimos quedar porque él no fue capaz de contenerse. Nico suspiró profundamente y se sentó en el pasto cerca de su lápida. Me moví y me senté a su lado, presionando mi cuerpo contra el de él mientras tomaba su mano. Su agarré de mi mano era firme y sólo nos sentamos ahí en silencio, mirando la tumba, mientras él decía lo que quisiera decir dentro de su cabeza. Después de un poco y apoyé mi cabeza en su hombro mientras él mantenía mi mano muy firme y su cuerpo comenzó a temblar.
"No me puedo quedar más" murmuró luego unos 10 minutos.
"Ok, nos vamos" susurré
Envolví mi brazo en su cintura, aferrándome a él fuertemente mientras caminábamos en silencio su auto. "¿Quieres ir por algo para comer?" Ofrecí, mirando su triste rostro.
El asintió y puso en su cara una sonrisa falsa. "Realmente no quiero comer nada fuera" levantó sus hombros, todo su postura era triste alterada. Hacía doler mi corazón.
"Mi casa entonces" sugerí, sabiendo que él no querría ir a su casa y ver a su padre mientras estaba alterado; ellos se evitaban el uno al otro como la peste en días tristes, cada uno conteniéndose a sí mismo en vez de uno al otro. Nico sonrió agradecido y nos dirigimos a mi casa.
Mientras estábamos comiendo Amy entró como un torbellino por la puerta, sin golpear como siempre y prácticamente gritó mi nombre mientras resbalaba hasta detenerse frente a mí. Yo miraba entre ella y Nico, en shock.
¿De qué demonios se trata esto?
"Amy, ¿qué pasa?" Ella prácticamente brincaba en el lugar frente a mí. Ella tenía sus manos aplaudiendo juntas y la sonrisa más grande de su cara.
"Estaba escuchando la radio y entonces adivina qué" dijo ella, afirmando mi brazo tan fuerte que realmente me dolía.
"Auch, ¿qué?" Pregunté, tratando infructuosamente de separar sus dedos de mi brazo.
"!Chris Brown viene a la ciudad¡" gritó haciendo que mis oídos pitearan.
"¡Santa madre de… imposible!" Inspire.
El asintió, aún saltando su lugar.
"O si y hará un concierto privado para 50 personas, es como en un mes y podemos ganar tickets de la radio. Regalarán dos de ellos. Todo lo que tenemos que hacer es esperar que salga una de sus canciones, llamar a la estación de radio, ser la 10ª llamada y contestar la pregunta correctamente. ! Son prácticamente nuestras ya!" Gritó, aplaudiendo y corriendo hacia la radio de la cocina la encendió con máximo volumen.
Mire hacia Nico disculpándome, pero él estaba sacudiendo su cabeza entretenido. Quizás ver a Amy toda loca sobre una estrella pop distrajo su mente de su madre. Es realmente una buena cosa.
"Chris Brown no es tan bueno, eh" bromeó, ganándose miradas letales de ambas chicas. Chris Brown era el cantante más sexy. Amy y yo teníamos una pequeña obsesión con el, en el mejor de los sentidos por supuesto, nada como perseguirlo o algo así.
Los tres nos sentamos ahí a jugar cartas por casi una hora antes de que la canción saliera.
Instintivamente Amy y yo alcanzamos nuestros teléfonos celulares, llamando la estación de radio. Y aunque él no soportaba a Chris Brown, Nico sacó su celular y trató de llamar por nosotras también.
Hacer que el teléfono a mi oreja excitada, pero quedé colgada así es que corté y traté de llamar de nuevo y de nuevo, pero nada pasó. Miré hacia Amy para ver una expresión desesperada en su cara mientras hacía un puchero, intentando lo mismo que yo, sólo re discando una y otra vez. Cuando la canción terminó pusieron a alguien en la línea quien, por supuesto, sabía que el cumpleaños de Chris era el 5 de mayo, entonces la estúpida niña ganó los tickets en vez de nosotros.
Gruñí frustrada y lancé el celular lejos de mí, haciendo pucheros.
Nico se rió y sacudió su cabeza. Mirándonos a Amy y a mi mientras ambas nos sentamos ahí amurradas, como pequeñas niñas.
"No es el fin del mundo, estará YouTube" nos animó, levantando sus hombros.
El asintió y puso en su cara una sonrisa falsa. "Realmente no quiero comer nada fuera" levantó sus hombros, todo su postura era triste alterada. Hacía doler mi corazón.
"Mi casa entonces" sugerí, sabiendo que él no querría ir a su casa y ver a su padre mientras estaba alterado; ellos se evitaban el uno al otro como la peste en días tristes, cada uno conteniéndose a sí mismo en vez de uno al otro. Nico sonrió agradecido y nos dirigimos a mi casa.
Mientras estábamos comiendo Amy entró como un torbellino por la puerta, sin golpear como siempre y prácticamente gritó mi nombre mientras resbalaba hasta detenerse frente a mí. Yo miraba entre ella y Nico, en shock.
¿De qué demonios se trata esto?
"Amy, ¿qué pasa?" Ella prácticamente brincaba en el lugar frente a mí. Ella tenía sus manos aplaudiendo juntas y la sonrisa más grande de su cara.
"Estaba escuchando la radio y entonces adivina qué" dijo ella, afirmando mi brazo tan fuerte que realmente me dolía.
"Auch, ¿qué?" Pregunté, tratando infructuosamente de separar sus dedos de mi brazo.
"!Chris Brown viene a la ciudad¡" gritó haciendo que mis oídos pitearan.
"¡Santa madre de… imposible!" Inspire.
El asintió, aún saltando su lugar.
"O si y hará un concierto privado para 50 personas, es como en un mes y podemos ganar tickets de la radio. Regalarán dos de ellos. Todo lo que tenemos que hacer es esperar que salga una de sus canciones, llamar a la estación de radio, ser la 10ª llamada y contestar la pregunta correctamente. ! Son prácticamente nuestras ya!" Gritó, aplaudiendo y corriendo hacia la radio de la cocina la encendió con máximo volumen.
Mire hacia Nico disculpándome, pero él estaba sacudiendo su cabeza entretenido. Quizás ver a Amy toda loca sobre una estrella pop distrajo su mente de su madre. Es realmente una buena cosa.
"Chris Brown no es tan bueno, eh" bromeó, ganándose miradas letales de ambas chicas. Chris Brown era el cantante más sexy. Amy y yo teníamos una pequeña obsesión con el, en el mejor de los sentidos por supuesto, nada como perseguirlo o algo así.
Los tres nos sentamos ahí a jugar cartas por casi una hora antes de que la canción saliera.
Instintivamente Amy y yo alcanzamos nuestros teléfonos celulares, llamando la estación de radio. Y aunque él no soportaba a Chris Brown, Nico sacó su celular y trató de llamar por nosotras también.
Hacer que el teléfono a mi oreja excitada, pero quedé colgada así es que corté y traté de llamar de nuevo y de nuevo, pero nada pasó. Miré hacia Amy para ver una expresión desesperada en su cara mientras hacía un puchero, intentando lo mismo que yo, sólo re discando una y otra vez. Cuando la canción terminó pusieron a alguien en la línea quien, por supuesto, sabía que el cumpleaños de Chris era el 5 de mayo, entonces la estúpida niña ganó los tickets en vez de nosotros.
Gruñí frustrada y lancé el celular lejos de mí, haciendo pucheros.
Nico se rió y sacudió su cabeza. Mirándonos a Amy y a mi mientras ambas nos sentamos ahí amurradas, como pequeñas niñas.
"No es el fin del mundo, estará YouTube" nos animó, levantando sus hombros.
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Capitulo 16 presente! espero que les guste!
Gracias por leer! ♥
Ya quiero el reencuentro entre Pedro y Pau x favor
ResponderEliminarAguanta un poco más Sil...
EliminarNO ENTIENDO LA ACTITUD DE PEDRO.SE MUERE POR PAU PERO LA HACE SUFRIR
ResponderEliminarja si, no es mucha la diferencia de edad... es eso lo que le preocupa!
Eliminarsi por favor que pau y pp se amiguen y luchen por su amor, gracias por subir este capitulo
ResponderEliminarde nada! vas a tener que esperar un poco más.. gracias!
Eliminarmuy bueno,seguí subiendo...
ResponderEliminarGracias!
Eliminaraiii me dan unas ganas de pegarle a pedro por hacer sufrir a Pau y encima se le pasea con la profesora esa frente a ella!!!. Otra cosa Nico es un tierno jajaja ,ya quiero leer el capitulo de hoy! :D
ResponderEliminarjaja Gracias! =)
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